Slack time

Hoy le gané a mi jefe. O sea, por fin llegué al punto donde, para que yo avance, él tiene que hacer algo antes.

Muchas veces es cuando las cosas se empiezan a poner aburridas, pero es martes a las 6:10, y la verdad recuperé el ritmo que había perdido con el cambio de máquina. Así que estoy bloggeando sin cargos de conciencia.

Básicamente ya acabé con todo lo que se me ha pedido; me falta enviar un correo a través de un JSP, pero existe una taglib que hace esto, así que no me preocupa. Acabé lo de manipulación de imágenes, y ya vi que Oracle es sólo otra base de datos. O sea

select * from tabla;

funciona como uno esperaría que funcionase.

Así que espero que mi jefe termine de darme la información que necesito. También le pedí, por el amor de Dios, más memoria. Esta Pentium III es engañosa; parece que funciona bien. Y de hecho sí lo hace: puedo editar en XEmacs bien, puedo correr Tomcat bien, y puedo compilar código Java bien.

La bronca es cuando hago las tres cosas al mismo tiempo.

Ojalá haya cosas divertidas por hacer; la verdad me lo he estado pasando bomba.

Siguiendo con las buenas noticias, por fin firmé actas, me pagaron en Ciencias y resulta que no importa que me hayan cambiado (por no decir “downgradeado”) de profe a ayudante, me van a seguir pagando.

Y en casa tengo 3 capítulos 3 de Dawson’s Creek esperándome.

Ah, la vida es bella… al menos mientras pasa esta primera semana medio lenta en Ciencias y llega la siguiente, en donde voy a pedirle cartas de recomendación hasta a el Harry…

IPO

Hoy terminó la semana laboral, pero estos últimos dos días fueron de una producción algo decepcionante para el ritmo que había tenido. El no poder instalar Cygwin me demoró muchísimo.

Como el jueves http://www.cygwin.com seguía muerto, hice un mirror de uno de los mirrors en arce0 (para garantizar velocidad y acceso), e instalé a pie Cygwin. Que resultó ser una experiencia mucho menos que placentera.

La maldita biblioteca cygwin1.dll seguía quejándose y quejándose acerca de que no tenía exportado el punto de entrada _impure_ptr. Whatever that fuckin’ means! Carajo; estoy acostumbrado a lddear bibliotecas en Unix; pero en Windows soy como un retrasado mental con mal de Parkinson y las manos atadas a la espalda. Que es justo la razón por la que instalo Cygwin nada más le pongo las manos a una máquina que tiene Windows (y que yo vaya a usar para trabajar).

Omar una vez me dijo que cuando me sentaba en frente de una máquina con Linux, mis dedos comenzaban a aporrear el teclado a una velocidad impresionante y cosas muy rápidas ocurrían en la pantalla. En cambio, en Windows parezco masahua en Aurrerá: dando tumbos, mirando confundido a un lado y otro, y sin saber exactamente qué hacer.

(Lo de “masahua en Aurrerá” es comentario de la amiga Meche de mi mamá; por supuesto es completamente Políticamente Incorrecto; pero no me importa porque se me hace muy chistoso.)

De verdad casi no hice nada este jueves y viernes, porque sencillamente no podía. La línea de comandos de Windows es una broma; y en 2000 es peor que en XP. En XP siquiera hay autocompleción; en 2000 uno tiene que hacer cosas como:

cd \doc*\c*\desk*\my*

si uno quiere ir ligeramente más rápido que un oso perezoso en velocidad de pánico.

Después de instalar y desinstalar cygwin varias veces, y de crear otro mirror de cygwin en arce0 (razón por la cual Enrique me llamó para decirme que le habían informado que estábamos haciendo “cositas” de nuevo en arce0… como si en algún momento de nuestra vida Enrique y yo hubiéramos hecho algo remotamente ilegal en esa máquina), pude al fin levantar bash. Lo demás fue de volada; denme un shell con autocompleción y directorios que se separen con “/” y yo me encargo de lo demás.

Luego está el problema de que esta “nueva” máquina tiene 128 poderosos megabytes de memoria. Lo que significa que cada vez que inicio Tomcat bien puedo irme por un café, porque todas las otras aplicaciones quedan inutilizadas. Pedí un DIMM de 128 a mis jefes los que me pagan (mi padrote), a ver si me la hacen buena. Por cierto muy sospechosos en el teléfono; que cómo me iba, que si estaba contento, que qué necesitaba. Muy acomedidos.

Cuando terminé de levantar mi ambiente de trabajo (Cygwin, XEmacs, ant, Tomcat), ya sólo me dio tiempo de hacer un vil JSP, y de hecho sólo la mitad. La otra requiere el llamar a un stored procedure, y no me daba tiempo ni de chiste a terminar la clase… de hecho creo que podía terminar la clase con todo y documentación de JavaDoc; pero si esperaba a que Tomcat reiniciara, bien podía cruzar Periférico e ir al cine. Y no podía porque Liliana estaba en casa esperándome.

Me llamó diciéndome que iba para mi casa y que me esperaba ahí. Ya platiqué con mi madre, y le voy a dar unas llaves a Liliana para que venga a trabajar en mi casa mientras yo trabajo en TMM. Se me hace muy chido, porque aprovecha la infraestructura de mi casa (mi maravillosa máquina y mi banda ancha, entre varias cosas), y puede trabajar tranquilamente. Mi casa es muy silenciosa.

Cuando llegué a casa, vi que había traído su nuevo coche: se compró un Ford Fiesta, nuevecito, bastante bonito. Ya le pegó, pero es cosa de nada.

Poco después de las nueve se fue, en su carro, y yo sintiendo entre gusto de que no tengo que ir a dejarla, y sentimiento de culpa de que me diera gusto el no tener que ir a dejarla. Sé que de verdad le conviene aprender a andar en carro, y que nos hará la vida mucho más sencilla a ambos; y no me voy a hacer pendejo: adoro la idea de no tener que ir al Cerro de la Estrella (ida y vuelta) para ir a dejarla… pero a la vez siento que fallo de cierta manera como novio. Igual y es mi macho saliendo por mi pecho; no sé.

Después vi Enterprise (sintiéndome algo mal de que ya por fin la cancelaron), y Dawson’s Creek. De mis desgracias para tratar de grabar Dawson ahora que trabajo, ahora sí me pasó la más ridícula de todas: ¡lo grabé en mute! Así que vi todo el programa como un show larguísimo de Marcel Marceau. De cualquier forma me gustaron ambos capítulos; especialmente el de Enterprise: en Dawson’s Creek sólo hubo una escena de Pacey y Joey, y fue realmente corta.

Después vi (electrónicamente) a Juan y le dije que mañana le caigo; igual y va Enrique. Estamos tratando de ponerle Gentoo a su máquina, y ya lleva un par de semanas la instalación. Por cierto que me dijo que tiene un blog él también: en blogspot. Tiene una entrada, y dice: “Bienvenidos a mi blog”.

Pero eso me hizo a pensar. Ya basta de este andar en el clóset: es hora de hacer la IPO.

Cuando RedHat cotizó en NASDAQ en la bolsa gringa, yo leía en todos lados que RedHat iba a ofrecer su “IPO”. Yo no tenía idea de qué carajo era eso, ni siquiera cuando me explicaron que significaba “Initial Public Offering”. Eventualmente llegué a comprender qué significaba, y qué importante era para una compañía. También aprendí que muchas veces, ofrecer la IPO también se podía decir como going public.

Pues carajo; I’m going public too. Y aquí está mi IPO.

No podía ser en otra máquina que no fuera abulafia. Pudo ser arce0; pero estoy más ligado a abulafia por razones sentimentales. Espero que no la crackeen como lo han hecho las últimas siete veces.

Pasar la base de datos y los estilos fue muy sencillo. Ya está corriendo, y esta es mi primera entrada. En una máquina pública. Verde; me da hasta cosa.

(Claro que el que esté en una máquina pública no quiere decir que le vaya a dar a nadie la dirección).

Pentium III, 128 RAM

Hoy por fin me dieron una máquina para mí solito. Resulta que cuando llegué, no había máquina para mí. Escenario común, por cierto, cuando uno llega a una compañía grande.

Me “prestaron” una temporalmente. Era una Pentium… no Pentium IV, III o II, Pentium… con 32 MB de memoria y dos gigas de disco duro. 32 MB de memoria… en mi casa tengo 1024. Mi tarjeta de video tiene 64 MB de memoria.

Pero encima de todo ello, venía con Windows… 95. Santa María Madre De Dios… había olvidado que se sentía eso. Fue como regresar a 1996. Lo más interesante del caso, es que es tal vez la instalación más estable de Windows 95 que yo haya visto. No se cayó ni una sola vez. Eso no me pasaba cuando usaba Windows 95.

Usé la divertida maquinita dos días, sin quejarme. Me decían que me iban a dar una máquina para mí después, así que no me preocupé. Al menos podía navegar. A 800×600… con 8 bits de profundidad. 256 colores para mí solito. Pero podía navegar.

Eso fue hasta que me enteré de que usaban esa máquina para correr procesos remotos con VNC. Así que un día me quedé viendo como se movía solito el ratón de mi máquina.

Al otro día llegó mi máquina. Fue un upgrade total: Pentium I, con 64 megas de memoria, 4 gigas se disco duro, y Windows 98. Ahí sí protesté. No había manera de que desarrollara en Java utilizando esa máquina. Me sentía como en 1998 con ella.

Mi jefe entonces dio con una solución salomónica: me prestaba su laptop mientras me conseguían una máquina que funcionase.

La solución funcionó casi más de una semana; conectaba la laptop a un monitor y teclado externos, y todo jalaba perfectamente. Pero por fin llegó mi máquina. Como era de esperarse, es un poco menos poderosa que la laptop: Pentium III con 128 megas de RAM y 5 gigas de disco duro. Windows 2000.

Al menos se puede programar con ella.

Pero he tenido broncas todo el día para actualizarle mi ambiente de trabajo. En primer lugar, http://www.cygwin.com ha estado caído todo el día; y yo no fui. Además, todo el tiempo que traté de bajar el JDK de Sun, se detenía al 8%. Lo bajé primero a arce0, y cuando traté de bajarlo con Firefox, ¡se detenía al 8%!

Después bajé wget para Windows, y cuando traté de bajarlo con wget, se detenía al 8%. Partí el archivo en arce0 en casi veinte pedazos, y pude bajar todos, excepto el que contenía el punto donde llegaba al 8%. Ese último pedazo lo zipeé, lo bajé, los dezipeé, pegué los pedazos, y por fin pude instalar el JDK.

Ahora sólo tengo el problema de Cygwin; de verdad no puedo trabajar sin él. Y la máquina se vuelve inútil al momento de iniciar Tomcat; pero creo que ya podré trabajar bien, sin preocuparme de que llegue mi jefe para que le tome la laptop.

Estoy haciendo un mirror en arce0, de un mirror de Cygwin. Bajaré los paquetes a esta máquina, y espero que pueda instalarlo de disco duro. Y ya tengo más chamba.

Ayer fui con Liliana a ver The Aviator.

The Aviator

The Aviator

Me impresionó la actuación de Leonardo DiCaprio; lo tenía en muy mala impresión como actor. Después comimos tacos (yo siete de suadero, con todo mucha salsa). Hoy llegué bastante tarde; cerca del medio día. Así que saldré después de las ocho; pero no es tanto problema. Me gustaría dejar la máquina ya lista para que mañana pueda trabajar cómodamente con ella.

Ensayos para Conacyt

Acabé ayer con la funcionalidad requerida del sistema, incluyendo la manipulación de imágenes. No fue tan complicado como pensé que sería.

Justo cuando estaba mostrándole el prototipo a mi jefe, Enrique me habló para que fuéramos al cine. Tenía pases gratuitos de no sé dónde, y expiraban esa misma noche. Así que terminé de mostrarle el programa a mi jefe y fui con Enrique a ver The Statement (Siete Crímenes), que podría ser muy buena película, si tan sólo no fuera tan mala.

The Statement

The Statement

Fui a mi casa a descubrir que Dawson’s Creek no se había grabado (de nuevo). Así que seguí jugando un poquito con Rhythmbox, y después me puse a llena el formato eletrónico del Conacyt.

No entiendo porqué me genera tanta angustia. Además de que el programa está mal hecho, claro. En algún punto piden una forma para que la firme la universidad, en donde se especifica cuánto cuesta la colegiatura e inscripción de cada término. La cosa es que yo ya tengo una carta firmada donde dice exactamente eso. Voy a dar esa; no podría encontrar una forma más absurda de burocracia que el que sólo aceptaran su forma.

También escribí las tres justificaciones que piden. La primera es porqué quiero irme a hacer un posgrado y porqué mi elección de universidad. La segunda es qué planeo hacer cuando regrese y si hay planes de estudio similares en México porqué elijo irme. Y la tercera es qué relevancia para el país le veo a que yo me vaya a hacer mi posgrado.

Creo que quedaron bien, pero tengo que echarles otro ojo.

En la mañana se me olvidó el gafete que necesito para entrar a la oficina y al comedor, así que regresé a mi casa y llegué a la oficina a las diez; lo que significa que me iré a las siete. Mi jefe me pidió nuevas cosas, que tampoco se ven complicadas.

Y platiqué con Edgar, que no nos habíamos podido coordinar antes.

Escupiendo Excel

Terminé los queries utilizando únicamente tags, que es über cool. Tardé un poquito más de lo que me hubiera gustado moviendo todo a Tomcat 5.0, pero valió la pena. Todo sale de forma muchísimo más sencilla.

Mi jefe me pidió el viernes que además de mostrar los datos en el navegador con los JSPs, le pusiera al sistema la opción de escupir un archivo de Excel con exactamente la misma información. Ya había visto en muchos lugares que hacían eso, así que supuse que no sería difícil. Pero de cualquier forma lo dejé para hoy.

Resulta que para hacer que el JSP escupa un archivo en Excel tengo que cambiar:

<%@page contentType=”text/html”%>

a:

<%@page contentType=”application/vnd.ms-excel”%>

Así que ya acabé “lo fácil” y tengo que empezar a hacer lo difícil, que es manipular una imagen con Java para mostrar un mapa que refleja el estado del sistema en tiempo real. No creo tampoco que sea difícil, pero le he estado dando la vuelta. Me dan flojera los gráficos.

Como me salió tan fácil lo de Excel, me premié instalando Gaim, para poder platicar en el messenger sin que la ventanita del webmessenger se me ponga encima cada vez que alguien me escribe. Lo geek y chido del asunto, es que me conecto a mi casa con SSH (Putty), y hago un túnel para que Gaim se conecte a localhost en lugar de al servidor de messenger. Mi túnel redirecciona la conexión al servidor de messenger. También redirecciono el puerto 80, pero ese lo mando a mi máquina en mi casa, donde corro WordPress. Eso me permite escribir entradas en el blog desde mi chamba, lo que me facilita encontrar excusas para evadir mi trabajo.

Tengo WWW, tengo salida SSH, y tengo Gaim. Esa es mi definición de ambiente amigable en el trabajo.

(Por supuesto, dudo que los administradores de red la hayan cofigurado para que los empleados puedan correr Gaim y SSH fácilmente; pero tampoco ponen tantas trabas.)

Le platiqué a Citlali que por fin tenía Gaim. Y en ese momento caí en cuenta de algo. Estoy trabajando en Windows XP (todavía no tengo una máquina mía mía, pero de eso platico luego), pero me di cuenta que estas son las aplicaciones que corro:

  • Firefox
  • XEmacs
  • Cygwin
  • Benthic Software Golden32
  • Tomcat
  • Putty

El Golden lo utilizo para conectarme a Oracle; pero realmente lo utilizo muy poco. O sea que mis aplicaciones como usuario final son software libre. Básicamente utilizo Windows como manejador de ventanas.

Por supuesto, Windows también se encarga del manejo de memoria y de acceso a hardware y nimiedades así. Pero es básicamente la misma configuración que tengo en casa… aunque extraño Rhythmbox.

Hay una discusión acerca de si es “bueno” para Linux que existan las mismas aplicaciones de software libre para Linux y para Windows. Los que dicen que sí, dicen que si primero el usuario final se cambia de aplicaciones poco a poco, moverlos al final con Linux será mucho más sencillo que si el cambio es brutal y de golpe. Los que dicen que no, argumentan que si tienen ya las aplicaciones, ¿para qué se cambiarán de Sistema Operativo?

Yo estoy con los que dice que es bueno. Pero además se me hace algo medio contradictorio que, si el software libre defiende la libertad de usuarios y programadores, ¿por qué van a coartar la libertad de alguien que quiere portar un programa a Windows? Encima de eso, es fabuloso tener las aplicaciones que me gustan aunque esté en Windows.

Tomcat 5

Por fin funcionaron los malditos queries. Algo o alguien había metido mano a la misma base de datos que uso para el desarrollo, y la consistencia de la misma se perdió. Con eso resuelto, me hice a la tarea de convertir los JPSs a que usaran taglibs.

Los tags son chidos. En primer lugar, permiten que se edite un archivo en XEmacs y que éste lo indente correctamente. Y por supuesto, la indentación es lo más importante del universo. Menos importante, también obligan a mantener la “lógica de negocio” fuera del JSP, y dentro de clases con interfaces bien claras según las reglas de la Orientación a Objetos. Eso hace al JSP más limpio y por ende mucho más manejable.

Una vez hice en Simitel un JSP que, literalmente, daba miedo.

Todo salió casi perfecto, hasta el momento en que tuve que llamar a un procedimiento estructurado de Oracle. No hay un tag para tal cosa en la JSTL, así que hice yo uno. Gran Dios; perdí horas en eso.

Básicamente el problema fue que Tomcat 4.1 no soporta el Expression Language, que es parte del estándar JSP 2.0, que sólo ofrecen las versiones de Tomcat 5 y para arriba. Por supuesto eso era la explicación más sencilla, pero yo me pasé horas experimentado y reiniciando Tomcat pensando que me había equivocado en algún parámetro de configuración. Debió ser obvio cuando vi que un argumento era recibido por el JSP literalmente como “${user}”. Carajo.

Eso fue para convertir el primer query a tags. Veinte minutos antes de irme, fui con mi jefe y le pregunté si podía utilizar Tomcat 5 en lugar de 4.1. Sorpresa sorpresa: sí puedo. Tardé menos de veinte minutos en convertir el otro query a tags (que no necesitaba ningún tag personalizado).

El problema en gran medida es que la JSTL soporta el EL; uno puede hacer cosas del estilo:

<c:set var="user">Canek Peláez Valdés</c:set>
<strong><c:out value="${user}" /></c:out></strong>

uno obtiene lo que se esperaría, o sea Canek Peláez Valdés. Pero si uno hace un tag personalizado con exactamente la misma funcionalidad, entonces obtendría el equivalente de ${user}. Lo cual no sólo es inconsistente; es estúpido. Carajo.

Independientemente hoy fue un fabuloso día para trabajar. Es viernes, así que entra el “viernes casual”, y no siento que soy el único que no lleva traje y corbata. Que de hecho creo que sí soy el único que no lleva traje y corbata. Pasé horas deliciosas frente a una máquina, rastreando un problema que en retrospectiva era bastante idiota (hint: leer la documentación de tu servidor de JSPs y ver si soporta el EL antes de tratar de usarlo… o al menos googlear un poco al respecto), pero esa es de las cosas que me gusta hacer de cualquier forma.

El proyecto por el que me estoy prostituyendo está especificado para que dure mes y medio. Dudo mucho que me tarde más de una semana hábil en terminarlo (de hecho le dije a mi jefe que si no acababa para el viernes algo estaba mal conmigo), y me tomé la libertad de perder tiempo en algo que realmente no importa. A mí me pagan igual si hago el proyecto utilizando tags o JSPs tradicionales. Pero es más divertido con tags.

Si todos mis días de trabajo fueran como el de hoy, pensaría seriamente en hacer mi vida así: trabajando de 9 a 6. Lamentablemente días como el de hoy son raros.

Conexiones Oracle

Quería terminar hoy con los dos queries que puedo hacer “fácilmente” (el tercero implica manipular una imagen, y eso no sé cómo hacerlo… todavía). Si mañana no acabo al menos esos dos, me voy a sentir muy frustado.

Está bien raro. Para poder obtener el estado de ciertas cosas en la base de datos, necesito limpiar los registros viejos que marcaban el estado, llamar a un stored procedure para que se llenen los registros nuevos con el estado actual, y sacar el estado de una tabla (que llena el stored procedure).

Ya había logrado eso con una herramienta que se conecta directamente a la base de datos. Al momento de implementarlo en Java, sin embargo, nomás no quiso jalar. No me marcaba ningún error, sencillamente me regresaba cero renglones. Carajo.

Una vez vi algo parecido (con MySQL, toda proporción guardada), y era que no podía utilizar un mismo statement (y a veces ni siquiera la misma conexión), así que cerré todo entre cada llamada a la BD. No jaló, y luego pensé que a lo mejor la tabla de donde sacaba los datos era temporal y que tenía definida vida de sesión, y que por alguna razón no me preservaba la sesión mi conexión.

Nada: la tabla no es temporal, y además parece que sí se preserva la sesión con mi conexión.

Pero lo más desesperante es que, después de un rato de estar jugando con queries, volví a intentar un query con la herramienta que se conecta directamente a Oracle, ¡y resulta que no hay nada en la tabla!

Me voy a casa: alguien además de mí le está metiendo mano a la BD, o bien ya llegué a mi horizonte de pendejismo. Ayer me dormí tarde instalando WordPress, así que no sería muy extraño.

¡Óra[c]le!

Hoy por fin pude hacer algo de chamba en mi chamba. Llevaba una semana atorado por el simple hecho de que no tenía máquina. De hecho aún no tengo, pero me reservo la historia para cuando por fin tenga una máquina para mi solito.

El proyecto se ve muy sencillo; casi de risa, pero me peleé toda la mañana tratando de crear un DataSource para una base de datos Oracle en Tomcat 4.1. Como siempre con estas cosas, son detallitos los que hacen que las cosas no funcionen.

Cosas para considerar:

  • En Tomcat 4.1 las webapps individuales no pueden tener su propio context.xml para su <Context>, sino que debe ir dentro del server.xml.
  • Como quiero que la webapp tenga su propio logger, necesito un <Context>, y Tomcat parece no querer abrir automáticamente el .war si la webapp tiene definido uno.
  • Oracle utilza unos URLs muy chistosos para las conexiones a las base de datos.

Además tengo a Citlali en una ventanita de MSN quejándose amargamente de un compañero de chamba suyo que escribe muy mal código. En general no tendría bronca, me gusta mucho platicar con Citla, pero estoy usando el webmessenger (estúpidas reglas de firewall, como generalmente pasa en las compañías grandes), y su ventanita sigue poniéndose encima de esta ventana, donde estoy posteando en lugar de terminar mi chamba.

Debería regresar a chambear.

Transportes Marítimos Mexicanos

En mi primer trabajo, la “oficina” era una casa (grande, pero casa), y trabajaba con otros cinco programadores, un administrador, una secre, dos “arquitectos”, y uno o dos jefes, dependiendo de cómo contáramos. Era un grupo de trabajo bastante lamentable; buenas gentes, pero… limitadas. Duré tres meses haciendo programitas en Power Builder.

¿Sabían que Power Builder es la herramienta del diablo, no? Y no me refiero a que sea difícil de usar, o incómoda. Me refiero a que es el medio por el cuál el Malo De A Deveras, el Patas-de-Chivo, el Anticristo en persona succiona las almas de los pobres programadores condenados a tener que hacer aplicaciones con “cueris” y “ventanitas”.

En mi segundo trabajo éramos siete programadores, un CTO, un CEO, un contador y dos más que se dedicaban a “ventas”. No soy mamón cuando digo que teníamos un ci-ti-ou y un ci-i-ou: los mamones eran ellos que ponían eso en sus tarjetas de negocios:

Serge Kruppa: CTO, Simitel

El buen Serge. Era un buen lugar para trabajar; probablemente lo siga siendo. Tenía que ser un buen lugar: duré un año a pesar de que hacía más de hora y media en llegar de mi casa a la oficina (que sí era propiamente una oficina), y hora y media en regresar. De hecho, la ubicación de la oficina era la única desventaja; en esa compañía pasé mi mejor experiencia laboral en la Iniciativa Privada.

Ahora trabajo en una compañía que es como un gran padrote, y que en lugar de tener putas tiene programadores. El cliente llama al padrote (mis jefes), y si les gusto (o sea, tengo lo que ellos quieren), me mandan. Es mi deber satisfacer al cliente. Y soy una completa zorra insaciable.

Así que después de cuatro años de carrera universitaria, terminé siendo puta. Cara, eso sí, pero puta al fin y al cabo.

Mi primer cliente fue ING Comercial América. Él me gustaba. Me trataba bien, y no pedía nada extraordinariamente locochón. Pero eso no era tan importante para mí; estoy acostumbrado a dar lo que el cliente pide. Lo que me encantaba era que hacía veinte minutos de mi casa a la suya. Después de trabajar un año perdiendo tres horas diarias en ir y venir al trabajo, uno desarrolla cierta fobia a la idea.

Lamentablemente ING decidió que no necesitaba mis servicios y me vi ante la perspectiva de ir a trabajar a Santa Fe, o quedarme sin chamba. Y Santa Fe es un no-no-doble-no, así que estuve desempleado unas semanas antes de que mi padrote me consiguiera otro cliente.

El nuevo cliente es TMM: Transportes Marítimos Mexicanos. Como ING, es una empresa enorme con cientos de empleados. Como ING, su mayor ventaja es que está muy muy cerca de mi casa.

Llevo una semana, y todavía estoy viendo cómo se desenvuelven las cosas. Me gustaría quedarme; no hago nada terriblemente interesante, pero está muy cerca de mi casa. Y de cualquier forma, no está ahí mi futuro.

Nunca lo ha estado.