La pintura

Teniendo pegadas y (más o menos) suavizadas las piezas de Asuka, lo que seguía era pintarlas.

Como ya he dicho múltiples veces, mi talento artístico es más bien nulo, así que pintar, en el sentido artístico, está fuera de mis posiblidades. Sin embargo, sí soy un pintor de brocha gorda competente; porque no es algo que necesite talento artístico, sino que está básicamente en la misma categoría que cambiar focos y fusibles o destapar cañerías.

Mi idea entonces era pintar en su totalidad las piezas, cada una con su correspondiente color, sin preocuparme de los detalles finos que debían ser dibujados, como son los ojos de Asuka, los números en el plugsuit y otras cosas por el estilo. Para eso, tenía un plan, que discutiré más adelante. El pintar en su totalidad cada pieza supuse que sería equivalente a pintar con brocha gorda.

Pude haber usado pinceles, pero sabía que si quería que se viera medianamente bien, debía utilizar pintura atomizada. Esto dejaba dos posibilidades: usar latas de spray; o utilizar un aerógrafo, lo que implicaba comprar uno junto con el correspondiente compresor de aire.

Las latas de spray son, individualmente, más baratas; pero iba a terminar usando muy poquito de varias; es básicamente imposible mezclar colores; y además vivo en un departamento: si me pongo a usar latas de spray aquí, iba a terminar intoxicándome yo solito.

Así que compré un compresor de aire chiquito y un aerógrafo más bien barato; la gente con talento puede usar buenos aerógrafos para pintar innegables obras de arte. Yo no tengo talento, entonces nada más necesitaba un aerógrafo medianamente competente para pintar de manera consistente. Básicamente, sólo necesitaba que si la presión del aire era constante, el aerógrafo no salpicara.

También compré todo un juego de colores para el aerógrafo; salió mucho más caro que latas de spray, pero son casi 20 colores que me van a durar años, que es otra ventaja: siempre y cuando uno cierre bien las botellitas de pintura líquida, no tienen fecha de caducidad. Además, puedo mezclar fácilmente colores para producir los que no vengan en mi juego de colores. También compré una botella grande de primer, que yo no tenía idea se le llamaba imprimación en español.

Lo primero que hice fue imprimar las piezas; sólo fotografié mi escudo de los Pumas y la cabeza y base de Asuka, pero vi que esto tenía futuro. La imprimación se puede lijar estando seca (que si se atomiza correctamente tarda minutos en secarse), con papel de lija muy fino, y volver a imprimar si se considera necesario. Esto ayudó a corregir varios de los problemas que llegué a tener al suavizar las piezas.

Cabeza imprimada

Cabeza imprimada
Base imprimada

Base imprimada

Teniendo todo imprimado, procedí a pintar. Resulta que la experiencia me gustó mucho; no sólo es altamente satisfactorio ver cómo poco a poco las piezas imprimadas iban adquiriendo color: además tiene una cualidad casi terapeútica el estar pintando con aerógrafo, al entrar en un estado meditativo en el cual yo normalmente no me encuentro excepto al programar, y en ese caso suele estar acompañado de un extremadamente alto nivel de concentración que no necesito al estar pintando con mi aerógrafo chafa.

Y la pintura vinílica atomizada por dicho aeorógrafo desprende un sutil aroma medio dulce que yo encuentro muy agradable. No se preocupen, sí usé máscara para pintar.

Teniendo las piezas pintadas yo me emocioné como niño chiquito, porque se veían increíbles. Las fotos, a pesar de que me parece que se ven bien, no le hacen justicia a los colores: se ven mucho más brillantes en persona.

Piezas pintadas

Piezas pintadas

En la cabeza, por cierto, aproveché que puedo mezclar mis pinturas antes de usar el aerógrafo; mi juego de pinturas no tiene un color carne, realmente, así que mezclé durazno (que es como naranja claro), rosa y blanco, y la verdad me gustó mucho cómo quedó la cara de Asuka.

El cabello pintado de naranja

El cabello pintado de naranja
El cuerpo pintado de rojo

El cuerpo pintado de rojo

Después seguían los detalles medianos; muchos de ellos me las ingenié nada más usando cinta de pintor para tapar lo que no quería que se pintara, y dejando al descubierto lo que se debía pintar. La cinta de pintor es muy noble; no daña las partes ya pintadas, no importa cuántas veces uno la pegue y despegue, entonces sólo debía poner trozos de cinta hasta que la parte que iba a pintar se viera de la manera correcta.

Pintando con cinta

Pintando con cinta

Pero eventualmente llegué al problema ineludible: tenía que pintar los detalles finos, como los ojos de Asuka y los números en su plugsuit. La idea de cómo resolver este problema me vino a la mente cuando vi en YouTube cómo le hacen los constructores de modelos de carros; muchos detalles de este estilo, sencillamente utilizan decals, que son como calcomanías que se ponen en agua caliente y se pegan al modelo.

Resulta que eso se puede imprimir en una impresora láser de color; venden el “papel” para esto. Entonces sencillamente dibujé los ojos en Inkscape (usando una imagen de Asuka como guía), y primero lo probé con papel común y corriente. Incluso sin color y la textura más bien fea del papel de impresión, se veía pasable.

Ojos de papel de Asuka

Ojos de papel de Asuka

El mismo diseño de ojos, junto con un montón de cosas que quería ahorrarme el dibujarlas, las imprimí en este “papel” especial, que compré en Amazon.

Detalles de Asuka

Detalles de Asuka

Como pueden ver, tenía la idea loca de usar este método para hacer también múltiples de las líneas negras que tiene el plugsuit de Asuka. Esto al final no funcionó, ahorita explico también.

Teniendo los ojos (y las cejas) los recorté; además pinté de blanco el espacio en la cabeza de Asuka donde irían los ojos (usando el método de la cinta de pintor), porque las calcomanías son transparentes.

Calcomanías de ojos de Asuka

Calcomanías de ojos de Asuka

El resultado me sorprendió lo bien (en mi opinión) que se ve.

Asuka con ojos

Asuka con ojos

También hice lo mismo con los números en el plugsuit.

El número de piloto de Asuka

El número de piloto de Asuka

También usé mi plastilina epóxica-tóxica para unir el pelo de Asuka.

Asuka con el pelo pegado

Asuka con el pelo pegado
Asuka con el pelo pegado

Asuka con el pelo pegado

Y usé la técnica de cinta de pintor para volver a pintar el pelo.

Asuka con el pelo preparado para pintar

Asuka con el pelo preparado para pintar

De nuevo, el resultado me gustó bastante.

Asuka con el pelo pintado

Asuka con el pelo pintado

Lamentablemente, las calcomanías no funcionaron para las líneas negras del plugsuit de Asuka; las calcomanías sólo funcionan o bien si se pegan en una superficie básicamente plana; o si son relativamente pequeñas. Las líneas se despegaban antes de que se secara la calcomanía.

Entonces, ya medio hasta la madre, agarré un marcador negro (sharpie) y a mano hice casi todas las líneas. Mi pulso es de maraquero, entonces no salieron perfectamente rectas; pero me gustó cómo quedaron.

Ese mismo pulso de maraquero usé para corregir ciertos detalles usando un pincel muy muy fino: errores al aplicar el marcador; la pintura blanca que en algunos casos usé como base antes de las calcomanías; y unos muy ligeros chorreos de pintura blanca del paso anterior.

Por último, primero intenté barnizar la figura con una laca transparente en spray; pero no me gustó cómo quedó. La laca debe aplicarse a una distancia casi exacta; muy cerca y se chorrea; muy lejos y se seca antes de pegarse al modelo, lo que hace que adquiera la apariencia de caspa.

Temiendo que se chorreara la laca, terminé aplicándola muy lejos y mi pobre Asuka terminó pareciendo que estaba cubierta de polvo. Así que volvía a sacar la resina epóxica-tóxica y con un pincel ancho con cuidado volví a cubrir toda la figura, nada más que sin preocuparme por las líneas de impresión esta vez (para este, punto ya habían desaparecido casi todas). Entonces fue en general una capa muy fina de resina epoxi.

Esto además ayudó a fijar algunas calcomanías que querían despegarse; en particular el “02” del pecho de Asuka fue un desmadre que se quedara en su sitio, por ser cóncava la superficie donde debe pegarse. También pinté y puse epoxi en la base de Asuka y por fin, después de varias semanas trabajando en mi figurilla, la misma quedó completada.

¿Salió perfecta la pintada? No; pero no tenía que serlo.

La próxima entrada será la última en esta serie; y por fin mostraré cómo quedó mi medio metro de Asuka.

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