El Gran Hotel Budapest

Después de ver 12 Years a Slave, fui con mi mamá a ver The Grand Budapest Hotel. Se aplican las de siempre, si es que acaso no la han visto.

The Grand Budapest Hotel

The Grand Budapest Hotel

Antes de empezar a hablar de esta película, quiero hacer la mención de que yo jamás en mi vida había visto una película de Wes Anderson, hasta a inicios de este año o finales del anterior (la memoria me falla al respecto).

Recuerdo que me recomendaron ampliamente The Royal Tenenbaums, y que yo tenía ganas de ver The Life Aquatic with Steve Zissou (en gran medida porque soy fan de Bill Murray); pero por alguna razón nunca vi ninguna de las dos. Aunque había oído críticas favorables, la verdad no tenía mucho interés en ver nada de Anderson por él mismo.

Todo esto cambió cuando mi mamá (yo no, mi mamá) rentó Moonrise Kingdom, y me convenció de verla (la verdad, no se me antojaba tanto de los avances). La película me dejó completamente bañado de asiento: dícese, anonadado.

Se ha convertido rápidamente en una de mis películas favoritas; me parece espectacular en casi todos los aspectos. Y aunque el hecho de que aparezcan varios de mis actores favoritos (Bruce Willis, Edward Norton, Bill Murray, Frances McDormand y Harvey Keitel, por mencionar a algunos) no le hace daño, son los dos jóvenes protagonistas, y el candor y verosimilitud con el cual interpretan su inocente romance, los que hicieron que me enamorara de esta película.

Si no fuera porque no he tenido tiempo (y, hasta recientemente, tampoco dinero), ya habría visto todas las películas de Wes Anderson.

Como sea, vi con mi mamá The Grand Budapest Hotel. Podría tratar de hacer una sinopsis de la trama, pero no le veo mucho sentido; es una mamada, como probablemente también podría categorizarse la trama de Moonrise Kingdom. Lo importante es que está bonita, magistralmente actuada (especialmente por Ralph Fiennes y Tony Revolori), y es delirantemente hilarante la mayor parte del tiempo (Agatha, interpretada por la maravillosa Saoirse Ronan, tiene un lunar en la mejilla con la forma de la República Mexicana… porque por qué no).

Así que váyanla y véanla; pero también vean Moonrise Kingdom, porque me sigue gustando más.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *