Y luego hay que pelar un pollo para que lo admitan

Con Omar por el messenger, discutiendo mi vida emocional (o la falta de):

Yo: Además me parecía que me encontraba mamón, insoportable, o ambos.
Yo: Pero el otro día de repente me sonrió como suelen sonreírme las mujeres cuando comienzo a gustarles.
Yo: Así, como si no lo pudiera creer.

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