Munich

Fui el jueves a ver Munich; la perspectiva de que hizo enojar a ambos bandos (israelíes y palestinos), era muestra de que iba a ser buena. Se aplican las advertencias de spoilers de siempre.

Munich

Munich

La película es muy buena. También es muy lenta, y aún más larga.

Parece ser que el tipo que escribió el libro sobre el cual se basa la novela, es un charlatán. Independientemente de eso, creo que el mensaje que trató de enviar Spielberg (que no necesariamente es el mismo mensaje del autor del libro), es uno que grita impotente la pregunta “¿cómo acabará esto?”, si no es que incluso “¿cómo acabamos esto?”

La película, aunque critica duramente al gobierno israelí y (un poco menos) a Golda Meir, falla en decir el más grave error que cometió el Mossad en su inútil (si no es que contraproducente) venganza contra los planeadores de la masacre de Munich en la operación Ira de Dios; el asesinato de un mesero en Noruega que no tuvo nada que ver con el atentado o con Septiembre Negro, y todo porque un soplón los informó mal. También menciona sólo de pasada el porqué del atentado en Munich. Por supuesto fue una pinche salvajada el secuestrar, golpear y acribillar a atletas israelíes que iban a las Olimpiadas a representar a su país; pero el que ese acto sea imperdonable no quiere decir que ocurriera nomás porque los palestinos están locos.

Los gringos suelen poner a los terroristas así: una bola de locos que hacen salvajadas. Muchas veces tienen razón: los terroristas suelen ser una bola de locos que hacen salvajadas; pero existe una razón por la cual se volvieron locos, y por la cual llegan a la conclusión de que no tienen de otra sino hacer salvajadas. Esta razón no suele ni siquiera existir en la forma de pensar gringa; Spielberg al menos la roza: “Dime Alí; ¿de verdad extrañas los campos de olivo de tu padre?” Pero creo que no es suficiente.

La discusión de si las razones de los terroristas justifican sus acciones, es una muy complicada y que yo no sé exactamente cómo responder. En la Segunda Guerra Mundial, varias resistencias (en Francia, Yugoslavia, Polonia, etc.) cometieron acciones contra los nazis (y civiles que apoyaban a los nazis) que desde cualquier punto de vista que se vea, fueron actos terroristas. Y generalmente al final de la guerra fueron considerados héroes todos los que las planearon y ejecutaron. No estoy comparando al gobierno israelí con los nazis (aunque hay gente que sí lo hace); sólo estoy poniendo un caso extremo como ejemplo.

Independientemente de la ideología, lo que sin duda la película logra transmitir es una angustia horrible por el hecho de que, como van las cosas en la película, el conflicto sólo se va acentuando. En la película, que ocurre poco después de 1973. Hace más de treinta años.

La película termina con una escena donde se ven claramente (gracias a la tecnología digital) las torres gemelas. El mensaje es claro: de forma secundaria (o tal vez no tanto), la destrucción de las torres gemelas es consecuencia de este conflicto.

Sin duda alguna la película es excelente, y altamente recomendable. Y por supuesto que hará enojar a mucha gente: palestinos e israelíes. Pero es terrible en su mensaje: porque no sólo es el obvio de que la violencia sólo genera violencia; también es la pregunta abierta de “¿y cómo chingaos salimos de esto?”

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