No había escrito del escándalo que está siendo lo más importante en las noticias (segundo sólo al mundial, obviamente) porque quería ver cómo se desarrollaba el asunto; en su momento la verdad ni siquiera pensé que fuera a tener mucho impacto.
Nadie lo hizo, por lo visto: especialmente los panistas.
En un momento elaboro sobre las acusaciones; pero primero quiero decir que el putazo fue administrado por el Peje de forma magistral. Lo hizo en el lugar y el momento exactos, y consiguió que la discusión nacional se dirigiera a eso justo antes del mundial, lo que hace que las posibilidades de una respuesta contundente del PAN sean mínimas. Ni siquiera para repararlo, por lo visto: el golpe agarró a Calderón y a los panistas completamente desprevenidos, y han dado respuestas contradictorias, se han enredado en la semántica en lugar del fondo de la acusación, y la Sheimbaum le ha puesto unas chingas contundentes a la Josefina Vázquez Mota en todos los foros donde han hablado las dos; al salir del noticiero de Carlos Loret de Mola dicen que por poco se pega contra una pared de lo contrariada que estaba.
Al Peje se le podría revertir esto si se demostrara que es mentira; pero no creo que eso ocurra (ahorita digo por qué), y además el golpe está dado. Sin duda alguna lo de “las manos limpias” ha sido abollado, y casi seguramente sin posibilidades de componerlo. Que eso no quiere decir que necesariamente ya haya perdido la elección, por supuesto; pero realmente lo veo muy cabrón.
El PAN definió el tono del “debate” cuando comenzó a decir que el Peje era un “peligro” para México y se lanzó con todo en la guerra sucia. Esto es lo mismo, sólo que en contra de ellos: quisieron jugar ese juego, yo digo que se aguanten. En esta forma de pelear (lo repito, sucia, pero que ellos se buscaron), todo se exagera, se saca de proporción, y se trata de utilizar para la causa de cada quien. Las mentiras, o al menos la manipulación de la verdad, no faltan.
Así que no dudo que se esté exagerando el caso que el PRD presenta. Sin embargo, todo parece indicar que estas cosas sí son ciertas:
- Sí hubo contratos entre empresas del cuñado y el sector energético
- Sí hay un crecimiento innegable en la empresa Hildebrando que es directamente proporcional a la carrera política de Calderón
- Sí hay inconsistencias entre las ganancias de las empresas del cuñado y sus declaraciones de impuestos
Se puede discutir la semántica: que exactamente en qué periodo de tiempo se dieron los contratos, que cuánto se ganó en ellos, que de qué porcentaje de las empresas es dueño el cuñado. Los perredistas jalarán los datos demostrables para poner a Calderón como un tipo corrupto que da contratos preferenciales a su familia; y los panistas tratarán de desmentir lo que puedan, y minimizar los demás. La “verdad” (ese cóncepto tan escurridizo que nunca parece encontrarse del todo en la política) probablemente esté en algún punto intermedio. Pero al menos el primer punto (que sí hubo contratos con la empresa mientras Calderón era secretario de Energía) es, fuera de toda duda, ilegal.
Eso, al menos, es cierto.
Los panistas tratarán de minimizar o desviar la atención, y un punto que ahora están manejando es que no fueron los miles de millones de pesos que dice el Peje; que fueron “sólo” unos “cuantos” millones. Esto es muy importante: aunque hubiera sido un solo peso, sigue siendo ilegal.
Yo no dudo que Calderón supiera de los contratos (él era el secretario). A lo mejor (aunque lo dudo mucho) no sabía que era ilegal; pero seguramente debió saber (o intuir) que no era ético. Pero aún incluso si no lo sabía, la ignorancia nunca justifica el violar la ley. Especialmente para funcionarios públicos. Y lo que más me molesta son las similitudes con el caso de los Bibriesca.
Me parece que la tardanza de respuesta del PAN, y las contradicciones en que han caído, son justamente porque hay elementos innegables de verdad en las acusaciones del PRD (ojo, esto no siginifica que todo sea completamente cierto). Y luego están cosas tan sospechosas como que la SHCP en dos días haya “descubierto” que los datos fueron “filtraciones” del GDF… cuando tardaron semanas en decir algo de los datos que sacó Campa en el primer debate.
No me gusta que en lugar de discusión de ideas tengamos una campaña en la que lo principal es ver quién le puede sacar más trapos sucios al otro; pero la verdad me alegro mucho de que se caiga de forma tan estrepitosa esta imagen de “honrabilidad” y “decencia” que han querido manejar los panistas (Calderón principalmente), como si cosas como el toallagate, la fundación Vamos México, los Bibriesca, Luis Pazos y Provida, Estrada Cajigal, etc., etc., no existieran o no tuvieran que ver con ellos.
El aparato gubernamental y panista (después de apendejarse al inicio) se está empezando a mover para tratar de manejar esta crisis; pero la gente no es pendeja, y ciertos puntos de las acusaciones son innegables. Creo que este fue un madrazo del que difícilmente podrá levantarse Calderón (que de por sí venía bajando en las encuestas), y con el mundial y sólo dos semanas de campaña (la última semana antes de las eleccionas ya no puede haber campaña), creo que éste será el evento sobre el cual se dirá después del 2 de julio que le costó las elecciones de forma definitiva.
De cualquier forma, para los que queremos que gane el Peje hay que seguir aprovechando esas dos semanas. Más que nunca estoy convencido de que vamos a ganar, y más que nunca también creo que hay que seguir llamando a la gente a votar. Porque ahora lo único que les va a quedar es tratar de manipular el voto o intentar hacer fraude; y la mejor manera para evitar eso es que vote la mayor parte del electorado.
Y de nuevo quiero decirlo; qué jugada más maquiavélica del Peje: no pudo hacerlo de mejor forma o en mejor momento.
