A finales de diciembre del año pasado fui a ver Aquaman and the Lost Kingdom.
Se aplican… ¿nadie fue a verla, verdad?
Aquaman and the Lost Kingdom es un churrito de superhéroes bastante divertido. ¿Es buena película? Ni de lejos. ¿Es la peor película de superhéroes, o incluso del DeECeU? No, tampoco ni de lejos.
Pero sí es la última entrega del más allá de podrido Snyderverse, además de contar con Amber Heard como (en papel) el protagónico femenino, y de una serie de circunstancias que hacían básicamente imposible que le fuera bien.
También es una película bastante mediocre; pero yo sí me divertí con ella, y Jason Momoa me sigue cayendo muy bien además de que hace muy buena mancuerna con Patrick Wilson.
No tengo idea de qué pudieron haber hecho los ejecutivos de Warner Bros. con todas las películas que estaban en post producción al momento en que se decidió hacer el golpe de timón hacia el Gunnverse; a la película de Batichica de plano la enlataron. Las otras consiguieron ver la luz del día, pero a todas les fue del nabo.
Como sea, Aquaman 2: La venganza es, tristemente, intrascendente en todos los sentidos, pero recuerdo claramente estar en el cine y divirtiéndome bastante con Aquaman y su hermanito peleándose como niños chiquitos. Nunca hubiera podido ser una película extraordinaria; pero bien pudo haber sido un churrito disfrutable que al menos recuperara lo que debió haber costado.
En cambio terminó siendo el triste final del Snyderverse, con tan mal tino que su última escena, que en condiciones normales hubiera sido sólo un chiste bobo, terminó siendo el peor posible broche del primer intento por parte de DC de tener un universo cinematográfico. La última escena es Orm, el hermano de Aquamán, poniendo una cucaracha en un sandwich que después se come, porque su hermano le dijo que las cucarachas eran como las langostas en la superficie.
Pero bueno; lo pasado, pasado. Vamos a ver cómo le va al Gunnverse ahora.
No tengo muchas esperanzas.
