Me robaron mi celular hace dos fines de semana, y eso me mantuvo lo suficientemente preocupado como para que dejara de escribir cuando mi ritmo de trabajo por fin disminuyó un poco. Planeo ahora sí volver a escribir más constantemente, comenzando por el montón de películas que he visto que no he mencionado.
Hace ya bastantes semanas fui a ver Thor: The Dark World. Se aplican las de siempre.
Fui a ver esta película porque tenía muchas ganas, y no me decepcionó en lo más mínimo. Es muy divertida, está llena de acción, está muy bien hecha, y las actuaciones son bastante buenas para ser la adaptación boba de un cómic todavía más bobo. Por suerte, además, sale Natalie Portman, porque si no yo creo que sí me hacía gay; Chris Hemsworth está muy guapo; es de verdad injusto (para nosotros hombres, digo) que gente como él y su hermano existan.
Como sea, así de divertida y emocionante como está, lo cierto es que también se vuelve rápidamente intrascendente en el cada vez más competido mundo de las adaptaciones de cómics a la pantalla grande; no me arrepiento de haberla visto en el cine, y salí de muy buen humor después de verla: pero no es nada particularmente novedoso. Sí veré una tercera parte, eso sí.
Así que vayan y véanla… si es que sigue en el cine; probablemente ya la quitaron.
