Últimamente me gusta planear mis idas al cine, porque como ya no voy tan seguido de hecho quiero ver algo que me interese. Ayer tenía que perder unas dos horas, y lo más provechoso era ir al cine, así que fui a ver si de chiripa me quedaba 2012 (y sí, ya sé que todo mundo dice que apesta, pero es el fin del mundo y eso generalmente vale la pena verlo en la pantalla grande).
No me quedó, y me metí a ver Planet 51. No resultó ser una tortura, pero ciertamente hubiera preferido ver algo más. Se aplican las de siempre.
La premisa de la película es medianamente interesante; un astronauta aterriza en un planeta que resulta estar habitado, y entonces él es el que termina siendo el alienígena. Además, a pesar del elenco gringo la película es de hecho española, lo que yo hubiera esperado resultaría en una perspectiva interesante y novedosa en una película de ciencia ficción/animada por computadora/para niños.
Lamentablemente esto no ocurre; es como si los realizadores españoles hubieran intentado complacer únicamente a un público gringo. Toda la trama está llena de referencias a películas de ciencia ficción gringas, el Planeta 51 termina siendo una caricatura de gringolandia en los cincuentas, y por supuesto el astronauta es gringo (hubiera sido muchísimo más novedoso si el astronauta hubiera pertenecido a la ESA).
Encima de ello, el doblaje (particularmente el del astronauta Chuck Baker) es intragable; yo esperaría que el original fuera mejor, pero la verdad no me consta. Los personajes son absolutamente unidimensionales, y la historia está llena de hoyos por todos lados; y sí, ya sé que es para niños; pero no por ello hay que suponer que son estúpidos.
En lo positivo la animación es decente (ciertamente no es mala), y hay varias partes donde sí me estaba meando de la risa; pero no pasó mucho tiempo para que me preguntara cuándo terminaría, porque me estaba aburriendo.
Es una mala película, y yo no la recomiendo. A lo mejor está bien para entretener a los enanos durante dos horas, pero no le veo más que eso.
