The Future Diary

Alrededor de la época en que estaba viendo Scum’s Wish, terminé The Future Diary; de hecho me la habían recomendado años atrás, pero no la empecé a ver sino hasta la pandemia.

The Future Diary

The Future Diary

Yukiteru Amano, un muchacho de 14 años, vive su vida apuntando religiosamente todo lo que ve en un diario en su teléfono celular (un flip-phone; la serie está basada en un manga que se comenzó a publicar en 2006), cuando de repente se ve envuelto en un torneo mortal donde participan múltiples personas: el ganador del torneo se convertirá en el nuevo dios del universo; el actual (y moribundo) dios (que por alguna razón era amigo de Yukiteru) es el organizador del mismo.

Cada participante tiene un teléfono celular, y algún poder asociado al mismo; Yukiteru en particular puede ver entradas de su diario en el futuro, y como él apunta todo lo que ve, es bastante útil porque puede en general enterarse de todo lo que verá en el futuro, excepto él mismo (Yukiteru nunca escribía de sí mismo, sólo de sus alrededores).

Independientemente de esa desventaja, Yukiteru hubiera durado como catorce segundos en un torneo donde los participantes tratan de matarse entre todos, pero se alía con él Yuno Gasai, un simpática, lindísima, sociópata y violentísima muchachita, que alegremente le informa que lo ama, y que tiene años siguiéndolo en secreto y anotando todo lo que él hace en su celular: su teléfono entonces le avisa de todo lo que Yukiteru hará, por lo que combinando ambos básicamente tienen completa información de lo que pasa alrededor de ellos, siempre y cuando permanezcan juntos.

Yuno no nada más tiene un teléfono perfecto como complemento al de Yukiteru; además es excelente para pelear a muerte (particularmente usando navajas y/o espadas), y una completa indiferencia a asesinar a cuantos seres humanos sean necesarios para mantener a Yukiteru a salvo.

Yuno Gasai

Yuno Gasai

La serie, como podrán ver, es estupidísima; pero también es divertidísima por varias razones.

En primer lugar, es muy interesante ver cómo funcionan los teléfonos de todos los participantes y las estrategias que se les ocurren para utilizarlos efectivamente y matarse entre ellos. En segundo lugar, la serie es violentísima al estilo de las películas de Tarantino: acción ininterrumpida, sangre a cubetadas, y siempre siendo muy entretenido.

En último pero definitivamente no menos importante lugar, Yuno se roba toda la serie; la simpática muchachita está genuinamente enamorada de Yukiteru (lo cual, dado cómo es ella, se traduce en que no pocas veces trate de asesinarlo), y Yukiteru se mantiene junto a ella porque sin duda alguna la necesita para sobrevivir, pero también porque no puede dejar de notar lo linda que es: Yukiteru está a la vez imposiblemente atraído a e increíblemente aterrado de la bellísima muchachita. Yuno no ayuda, cambiando mercurialmente de besarlo apasionadamente a tratar de acuchillarlo en lo que dura un parpadeo y dependiendo de las circunstancias.

Belleza asesina

Belleza asesina

La serie es arrecha, obviamente, con además bastantes temas adultos que van de la explotación sexual infantil a, ya saben, el asesinato de decenas de personas utilizando bombas por parte de una terrorista convertida eventualmente en superheroína.

A mí me gustó mucho; la historia no tiene el menor sentido, especialmente hacia el final cuando se revelan realidades paralelas y viajes en el tiempo, pero el trayecto es genuinamente divertido y Yuno es de los personajes más dañados que yo haya visto en un animé, sin por ello dejar de ser lindísima y adorable; incluso cuando mata gente al por mayor, como si fuera miércoles de plaza.

Y aunque de forma muy enferma, la serie está anclada en el romance entre Yukiteru y Yuno, y de forma increíblemente oscura y delirante les permite a los dos tener su final feliz como dioses en un nuevo universo que ellos crean y donde definen sus propias reglas.

Es, de manera terriblemente tóxica, de las series más románticas que he visto. Pero no se preocupen: está toda la demás violencia para que se entretengan con eso, si el romance no les interesa. Además, el diseño de personajes está bastante padre; la animación es espectacular en la delirante acción mientras todos tratan de matarse entre ellos; y la música está muy divertida.

Así que yo sí lo recomiendo; nada más no esperen un animé convencionalmente divertido o romántico: es gente destazándose con lujo de violencia durante 26 episodios. Está en Funimation, si les interesa.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *