Avengers: Endgame

El domingo del fin de semana de su estreno fuimos a ver Avengers: Endgamge. Originalmente me iba a esperar a después del fin de semana del estreno, pero vi que eso no iba a afectar en lo más mínimo la tonelada de dinero que iba a ganar la película, además de que iba a ser medio imposible evitar spoilers, así que siempre sí fuimos ese domingo.

Diría que se aplican las advertencias de siempre, pero supongo que ya todo mundo fue a verla, múltiples veces en algunos casos.

Avengers: Endgame

Avengers: Endgame

Avengers: Endgame no es basura, lo cual está chido, porque el estilito de Marvel, por más disfrutable que sea, a mí ya me está cansando.

Pero no es una buena película; a lo mejor logran colar una nominación al Oscar para Tony Stark, pero sinceramente no creo que lo mereciera. Es un churro de acción muy entretenido y ciertamente la primera vez que la pantalla grande logra encapsular lo que eran las culminaciones de grandes “eventos” en los cómics (Crisis on Infinite Earths; Secret Wars; Identity Crisis; Civil War, etc.) También (y esto no puede enfatizarse demasiado) es impresionante desde el punto de vista logístico.

Pero no es una buena película: la historia es incomprensible si uno no ha visto aunque sea una parte importante del MCU y los hoyos en la misma son enormes (y en muchos casos ridículos).

Dicho sea eso, yo merito sí me eché todas las películas del MCU (en el cine), y eso hizo que la película fuera deliciosamente disfrutable para mí y otros como yo. No la hace buena; pero sí la hace más disfrutable.

Me hizo recordar el final de Lost, la serie de televisión; las últimas temporada fueron terribles y tiraron a la basura casi todas las cosas maravillosas que habían creado las primeras temporadas. Pero para la temporada final trajeron de regreso a básicamente todos los personajes de la serie, y de alguna manero eso logró que mucha gente terminara la misma con un buen de sabor de boca. La gente en general reacciona bien al fan service.

En esta última película de los Vengadores (y probablemente la última con la alineación original), sale todo mundo y hacen referencia a casi todas las películas anteriores del MCU. Se puede discutir que la película son una serie de viñetas, cada una siendo básicamente fan service, cosidas juntas para extraer una reacción emocional del espectador que ha seguido este universo desde hace más de una década. Dícese, alguien como yo.

Las escenas más impactantes de la película, desde un punto de vista emocional, dependen (en gran medida) de haber visto otras películas del universo Marvel; uno sólo puede emocionarse de ver a Cap recoger a Mjölnir si recuerda que en Age of Ultron Steve lo había intentado y probablemente (en restrospectiva) decidió no moverlo para no hacer sentir mal a Thor; uno sólo puede emocionarse con el chasquido de Tony y su frase “I’m Iron-Man” si recuerda que fue como termina Iron-Man, la película que inició todo esto; uno sólo puede emocionarse de ver cómo the Ancient One separa a la proyección astral de Bruce del cuerpo de Hulk si recuerda que es lo mismo que hace con Stephen Strange en Dr. Strange.

La película no funciona por sí misma; depende de todas (o una buena cantidad de) las otras películas del MCU. Y sinceramente, se lo han ganado los creadores del MCU (particularmente Kevin Feige): fue más de una década de construcción de un universo, con películas de dudosa calidad en algunos casos, pero siempre altamente entretenidas, que permiten a esta colosal conclusión aterrizar de forma efectiva para la gente que al menos tiene una idea de qué ocurre en dicho universo.

Que en su defensa, es una parte considerable de la población del mundo mundial; todo mundo (o casi) ha visto aunque sea un pedazo de este universo.

A mí me encantó, pero justo yo soy el tipo de personas a las que más podía gustarle esta madre, que durante la última década mi consumo de cultura popular incluyó religiosamente a todas las películas del MCU, siempre yendo a verlas al cine, muchas veces los días que se estrenaban. Y yo caí en cuenta de lo mucho que me gustó está película, cuando me emocioné como niño chiquito cuando Cap dice “Avengers, assemble!” en el clímax.

Nunca he sido fan de los Vengadores. Para mí la que importa es la Liga de la Justicia; y en el Universo Marvel serían tal vez los X-Men. Pero de todas formas me emocioné cuando absolutamente todo mundo aparece para partirle su mandarina en gajos a Thanos y su ejército de Fácilmente Descartables Lacayos.

Nunca había habido algo así en la historia del cine mundial, con lo más cercano siendo la octava película de Harry Potter. Pero en el caso de Endgame se malabarean como catorce millones de personajes distintos con historias interligadas a lo largo de varios años y con harta acción CGI porque obvio eso no podía faltar. Eso no hace a la historia buena o profunda (es mucho más profunda y mucho mejor escrita la del joven mago inglés); eso no hace a los personajes entrañables o tridimensionales (ditto). Pero sí causa un impacto emocional innegable y refleja muy bien cómo han funcionado los cómics desde hace setenta años; por supuesto que nos vamos a emocionar la primera vez que veamos a Superman platicar con Batman, no importa lo soso que sea lo que lleguen a decirse.

Así que aplaudo esta película y voy a seguir yendo a ver todas las películas del MCU al cine, por lo menos mientras sigan siendo entretenidas. Como fan de cómics desde mi adolescencia me encanta que hagan estas madres y Endgame es (dadas las películas del MCU que la preceden) lo mejor se podía esperar para esta conclusión a la alineación original del los Vengadores. Lo interesante por supuesto será ver cómo le hacen para mantener la fábrica de dinero funcionando.

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