Control equis, control ce

Desde hace meses (o incluso años) he ido modernizando mi uso de herramientas en la computadora.

Uso Firefox para navegar, Evolution para leer mi correo, Liferea para leer RSS, Rhythmbox para escuchar música, todos los archivos multimedia de mi computadora están indexados con Beagle (y eso funciona de pelos, por cierto), bajo torrents con Azureus (traté de usar Deluge, pero Python todavía no escala bien para aplicaciones que usan extensivamente la memoria), y copio archivos a otras computadoras usando Nautilus con su excelente soporte para SFTP (que espero mejore todavía más en la siguiente versión, cuando comiencen a usar gio y GVFS).

Mi lector universal es Evince, y ahora que por fin soporta el llenar formas PDF estoy considerando seriamente desinstalar el Acrobat Reader. Veo imágenes con Eye of GNOME, y las edito con The GIMP; mis fotos (que tengo que actualizar, por cierto) están archivadas y perfectamente catalogadas con F-Spot.

Mi uso de la línea de comandos se ha reducido a cuando hago cosas como root (que últimamente es básicamente actualizar el sistema) y cuando tengo que editar archivos remotos (que espero eso ya funcione como debe de ser en GNOME con gio y GVFS).

Todas mis herramientas por lo tanto son sin duda alguna modernas… excepto por XEmacs.

XEmacs es un programa que básicamente no hace el café porque las cafeteras no tienen puertos USB. Si no, lo haría. Es un programa (algunos lo llamarían incluso sistema operativo) que ha sido optimizado a lo largo de casi treinta años para que, utilizando sólo el teclado, uno pueda escribir código rápido. Usando XEmacs yo sin duda soy mucho más rápido para programar que con cualquier otro editor.

Y sentía que era lo mismo con \LaTeX{} hasta que mi tesis pasó de las veinte cuartillas. En ese momento XEmacs se volvió lentísimo.

Debo hacer notar que no es un problema de XEmacs; tiene algo que ver con Compiz Fusion y mis controladores de NVidia en mi máquina de escritorio. En mi latop, que es como tres veces más lenta (no exagero), y que tiene una pinchurrienta tarjeta de video Intel, XEmacs jala de pelos.

Pero en mi AMD 64 X2 +3800 con una tarjeta de video NVidia 6800GS de 256 megas de memoria, XEmacs es inmanejable. El problema no afecta sólo a XEmacs; la terminal de GNOME también tiene unas broncas espantosas para cambiar de tamaño y maximizarse. Supongo que es un problema con las fuentes y Compiz (en Metacity no tengo problemas); no sé, no me he puesto a investigar a fondo. Tenía que acabar mi tesis.

La solución más sencilla (dado que tenía que terminar la tesis) era dejar de usar Compiz y regresar a Metacity, al menos temporalmente. Pero aunque muchos no me creen, yo siento que hago las cosas mucho más rápido en Compiz que en Metacity; y en particular al cambiar de escritorios sí hay una diferencia enorme entre el primero y el segundo: en Metacity uno puede ver cómo se redibujan las ventanas cada vez que se cambia de escritorio.

Y yo ya me había acostumbrado a tener mi tesis en un escritorio, y los artículos o páginas de la red que necesitaba consultar en otro.

Pensando seriamente terminar la tesis en mi laptop, me encontré con un screenshot de GEdit (el editor de texto de GNOME) en Planet GNOME, y vi que tenía soporte para \LaTeX{}. Ya investigando vi que era un plugin en Python, así que lo bajé y sólo para ver qué tal estaba comencé a editar mi tesis ahí.

GEdit editando LaTeX

GEdit editando LaTeX

La maldita cosa funciona de pelos. La verdad no extrañé a XEmacs.

Mucho tiene que ver que yo nunca aprendí a usar como realmente se debe AUCTeX, el paquete especializado de \LaTeX{} para [X]Emacs. Sus usuarios juran que casi casi le escribe a uno el documento.

Yo usaba lo mínimo de AUCTeX cuando editaba \LaTeX{} con XEmacs. Creo que aprovecho mucho más el editor cuando programo; no me veo cambiando a GEdit o a Anjuta dentro de poco para programar.

Pero me parece que eventualmente así será. GEdit no es tan poderoso como XEmacs; pero potencialmente lo es, porque puede extenderse usando Python como XEmacs se extiende usando elisp. Además de que prefiero Python cualquier día en lugar de cualquier forma de LISP.

Con \LaTeX{} además GEdit ofrece algunas ayudas bonitas; tiene un navegador de archivos integrado (también funciona aunque uno no edite \LaTeX{} por cierto):

Navegador de archivos

Navegador de archivos

Y ofrece soporte para cosas como BibTeX; nada del otro mundo, pero está bonito:

BibTeX

BibTeX

La verdad me sentí muy cómodo usando GEdit para terminar mi tesis; y se puede usar la mayor parte de la funcionalidad del editor sin usar el ratón, lo cual para mí es fundamental. Además se integra perfectamente con GNOME: Evince se abre automáticamente cuando uno compila el PDF, por ejemplo; o uno selecciona “Places → Recent Documents → capitulo1.tex” del menú principal de GNOME y GEdit se abre (porque los archivos .tex están asociados a él).

No voy a renunciar a XEmacs… todavía. Pero sí le veo sus días contados; GEdit me sorprendió mucho, realmente es muy poderoso y como doce veces más rápido que XEmacs. Lo cual no es muy difícil, por supuesto.

Así que no dudo que dentro de poco Anjuta o el mismo GEdit puedan darme el mismo poder que me da ahora XEmacs, y en ese momento mi escritorio usará exclusivamente aplicaciones basadas en Gtk+. Ya ahorita utilizo RapidSVN para manejar mis repositorios SVN, y Giggle para manejar los repositorios de Git; utilizo Meld para ver diffs gráficos (utiliza cairo, y se ve de pelos); y cuando programo cosas en Gtk+ utilizo Glade y DevHelp. El editor es lo único que me falta.

Y me da gusto ver que dentro de poco (espero) podré reemplazarlo.

Sobresexualizado

Justamente leyendo Occasional Superheroine fue que comencé a oír bastante acerca del término oversexualized, que sin un gramo de originalidad decidí traducir como sobresexualizado.

M. J. y Black Cat

M. J. y Black Cat

Valerie (la autora de Ocassional Superheroine) suele quejarse amargamente cuando los personajes femeninos en los comics (especialmente los realmente importantes, como Wonder Woman, Catwoman o Jennifer Walters, mejor conocida como She-Hulk) son presentadas en poses (a su parecer) ridículamente sexys y con sus trajes más ajustados o cortos de (según ella) como normalmente son.

Wonder Woman

Wonder Woman

La idea (porque he de admitir que no termino de entender de qué se queja), es que estas mujeres (en los comics, claro; en realidad no existen) son personas fuertes y decididas, y que representarlas (según ella) como poco más que teiboleras es no sólo faltarles el respeto a los personajes y a los lectores que los siguen, sino además es caer en la idea de que la única manera de vender más comics es (literalmente así lo dice) “enseñar más carne”. Eso (repito, según Valerie) pone en segundo grado lo realmente importante (según ella) de los personajes: que son mujeres fuertes, independientes, etc., etc. El argumento (me parece; repito que no termino de entender) es que mujeres como ellas no necesitarían estar enseñando los calzones.

Lady Blackhawk

Lady Blackhawk

También hay un argumento de que de por sí hay un número relativamente pequeño de lectoras de comics, y que la representación que reciben las mujeres en ellos no sólo evita que más lectoras se acerquen, sino que aleja a las que ya hay.

Power Girl vs. Supergirl

Power Girl vs. Supergirl

No voy a negar que a veces las poses de las superheroínas/supervillanas, sus atributos (por decirles de alguna manera) y sus uniformes son ridículamente exagerados para hacerlas resaltar sexualmente.

Elektra

Elektra

Tampoco voy a negar que existen dibujantes que se divierten horrores haciendo pin-ups que no pueden calificarse de otra forma más que eróticos.

Gwen Stacy, Black Cat, M. J.

Gwen Stacy, Black Cat, M. J.

…y otros que muchos (pero yo no) calificarían incluso de pornográficos.

M.J.

M.J.

Lo que pasa es que, ante estos innegables hechos, yo pregunto:

¿Y qué carajo tiene de malo?

Black Cat, Spidey, M.J.

Black Cat, Spidey, M.J.

Yo me considero feminista. Uno de mis padres es una mujer inteligente e independiente; y de hecho ocurre que en mi vida la mayor parte de las mujeres cercanas a mí son terriblemente inteligentes. Cuando veo una mujer sexy no pienso en ella como objeto sexual. Venga, en toda mi vida nunca he visto a mis compañeras sexuales como objetos de ningún tipo; en particular no sexuales.

Que una mujer sea sexy (incluso de forma exagerada al punto de la caricatura) no tiene por qué decir que yo no la voy a respetar y/o admirar. Son dos cosas completamente independientes.

No es que una mujer necesite ser sexy. Es que es su derecho, si así lo desea, el verse sexy. Si no me parece como los retrasados mentales gobiernos panistas que han intentado prohibir el uso de minifaldas en oficinas de gobierno. Siempre que los artistas dibujan sexys a las superheroías/villanas, yo lo interpreto como que son ellas las que así decidirían hacerlo. Porque para mí que una mujer sea inteligente e independiente no está peleado con que quiera verse sexy si así se le pega la gana. Por ella misma o por su pareja; a mí me parece completamente normal que una mujer (si así lo desea) se vista sexy para su pareja.

M.J.

M.J.

Del punto de las lectoras. Por las mismas razones no creo que las mujeres sexys en los comics ahuyenten a las lectoras; si son ahuyentadas lo son por razones más profundas, me parece. Pero además, ¿qué nunca han visto cómo dibujan a los hombres?

Superman

Superman

¿De verdad creen que la mayoría de los hombres que leemos comics esperamos poder llegar a vernos así?

Algunas mujeres me podrán decir: “es que no es lo mismo”. Y para ese momento perderán cualquier tipo de credibilidad ante mí para poder discutir nada que tenga que ver con feminismo. Porque el punto es que debe ser lo mismo.

El autor de todas las imágenes de esta entrada (que no me hago güey; en gran medida la escribí para poder ponerlas) es Ed Benes, y en particular las saqué de su fotoblog. Ah, excepto la de Superman; esa la encontré con Google.

Benes es el actual dibujante de Justice League of America, y a mí me parece un artista fabuloso.

La Trinidad

La Trinidad

En particular, quiero comentar esta imagen suya de Wonder Woman:

Wonder Woman

Wonder Woman

A algunos les podría parecer una imagen sobresexualizada. Y ciertamente es difícil no notar el hermoso trasero de Diana en un calzón estrellado mucho más diminuto de cómo generalmente lo dibujan.

Sin embargo lo que a mí me llama la atención del dibujo es la poderosísima espalda de Marvila (que no deja de ser hermosa), así como los músculos de sus brazos y sus puños cerrados, que junto con la tensión que su lenguaje corporal transmite hablan de un personaje atormentado. Y los detalles de las pequeñas cicatrices que cubren casi todo el cuerpo de la Princesa.

Pueden ver en el dibujo a una reina sabrosísima enseñando casi todas las nalgas. O pueden ver en él a una guerrera pasando por un momento difícil.

Yo elijo lo segundo. Y si eso es sobresexualizado, yo no tengo nada encontra.

No Pink Ponies

Poco después de regresar de California, leyendo Occasional Superheroine (gran blog de una fanática de comics feminista), salió una liga a un webcomic que se llama Marry Me, y decidí echarle un ojo.

El webcomic está divertido; sin duda alguna basado en lo que de hecho ocurrió con Britney Spears, la historia trata de Stasia, una cantante pop apenas salida de la adolescencia que durante un concierto se aloca y se casa con un fan de la primera fila que tenía un letrero que decía “Marry Me”.

(Lo divertido es que el chavo, Guy, le estaba sosteniendo el letrero a su mejor amiga lesbiana, que era la realmente enamorada de Stasia: Guy ni siquiera había oído sus canciones.)

El webcomic está divertido, repito, si bien sale de forma muy inconsistente y la historia se ha movido de forma medio lenta. Lo que sin duda me pareció maravilloso fue el arte, a cargo de Remy “Eisu” Mokhtar, un dibujante de Malasia con obvias influencias manga, y que tiene un particular don para dibujar chavas que irradian simpatía. No sé cómo mejor describirlo; sus personajes femeninos son sexys, pero no sobresexualizados (no que yo tenga ningún problema con personajes femeninos sobresexualizados), y de alguna manera parecen tener un aire entre inocente e inteligente al mismo tiempo. Me encantan.

Investigando más de Eisu, descubrí No Pink Ponies.

Así como hay películas que no tienen mejor forma de describirse que como chick flicks, No Pink Ponies no tiene mejor forma de describirse que como chick webcomic… lo cual lamentablemente suena estúpido.

Sin embargo, aunque la premisa principal de No Pink Ponies es la vida sentimental de Jess (que en general consiste en perseguir, de forma muy torpe además, a un único galán), lo realmente divertido del webcomic es que Jess es una geek de comics hecha y derecha. De hecho el webcomic comienza con Jess abriendo su propia tienda de comics para leer los que ella quiera, y además poder contratar como empleado a su galán en potencia (a quien conoce comprando comics en otra tienda).

Alrededor de ella hay otros personajes, varios de ellos los estereotípicos geeks de comics, su mejor amiga que sale con su hermano… el cual es negro, y Maureen, una chava cuyo personaje se basa físicamente en Jennifer Love-Hewitt, y que es lesbiana y está enamorada de Jess sin que esta última lo sepa.

Los personajes del webcomic son bastante tiernos, y toda la trama tiene un indudable aire girly-girl. Sin embargo, no es pero para nada algo como Lágrimas y Risas, y tiene una intersección muy grande (además de muy divertida) con varios aspectos del geekdom de lectores de comics. La historia, por lo tanto, no son ponis rosas; lo cual es la mejor forma de explicar el título.

Pero además, como dije arriba, Eisu tiene la virtud de que de alguna manera hace a sus protagonistas femeninas encantadoras; Jess es un personaje adorable en muchísimos aspectos, y nada más por ella vale la pena leer el webcomic.

Jess

Jess

Ambos webcomics los recomiendo; y ninguno de ellos salió hace mucho, así que es muy fácil ponerse al día con ellos.

“Still Crazy…”

Estoy retrasadísimo en qué ocurre en el Universo Marvel.

Para los que no lo sepan, a cada continuidad autocontenida en comics (aunque en últimos tiempos se ha extendido a series de televisión, libros e incluso películas) se le suele denominar “Universo”. En comics los más importantes por supuesto son Marvel y DC.

Yo siempre he preferido al Universo DC al de Marvel; aunque en personajes individuales sin duda mis favoritos están en Marvel (dícese Spider-Man y los X-Men, para ser original). El Universo DC es en parte mi favorito porque cuando comencé a leer comics en serio (circa 1994), la Crisis en las Tierras Infinitas estaba suficientemente cerca en el tiempo (fue en 1986) como para que se sintiera “fresco”, además de que la amalgamación de personajes de varias compañías de comics que ese “evento” causó (Fawcett Comics, Charlton Comics y otras compañías fueron compradas por DC y todos esos “universos” se integraron en la Crisis) dio como resultado un universo enormemente complejo y muy divertido.

Además en México era mucho más fácil leer al Universo DC que al Universo Marvel; durante años el Grupo Editorial Vid ha publicado los comics de DC haciendo un trabajo relativamente decente, mientras que Marvel fue siempre un desmadre entre Novaro, un tiempo Vid, luego Marvel mismo, y ahora creo que es Televisa (en un convenio con Marvel) quien publica los comics de ese universo.

Como sea; de los comics que tengo casi completos (del verbo me faltan como 20) es “El Hombre Araña Presenta”, de cuando Novedades imprimía los comics de Marvel en México. Ahí se imprimieron historias de los Cuatro Fantásticos (el periodo de John Byrne; altamente recomendable), los X-Men (incluida La Saga de Fénix Oscura) y Avengers de la Costa Oeste.

Mi conocimiento del Universo Marvel en gran medida viene de ahí; un poco también de la Saga de los Clones de Spidey y de Onslaught con los X-Men cuando Vid retomó la publicación, pero en general lo que sé del Universo Marvel viene de lo que Novedades publicó entre 1980 y 1996 ó 1997.

De DC en cambio tengo un conocimiento mucho más profundo, y ahora que he vuelto a conseguir comics (fue en California; y tengo que escribir una entrada de ello), decidí sólo buscar del Universo DC. En este momento estoy más o menos al tanto de lo que ocurre en el Universo DC.

Del Universo Marvel sólo me llegan chismes de lo que llego a ver en los blogs de comics que he comenzado a frecuentar. Sé que Peter Parker desclosetó su identidad secreta en la Guerra Civil, y que mataron al Capitán América (je, quiero ver cuánto tiempo dura eso). También que parece ser que borraron de la “realidad” el matrimonio de Spidey con Mary-Jane (lo cual se me hace herético, por decir lo menos). Pero no sé bien qué pedo con ese Universo (y requerirá meses de leer TPBs antes de que esté al día).

Lo que sí sé es que ha habido cuatro grandes “eventos” en Marvel en los últimos años: House of M, Avengers Disassembled, la Guerra Civil y hasta hace poco World War Hulk. Lo que importa para esta entrada es el primero, House of M.

No he leído esa saga, pero básicamente (por lo que he oído) va así la cosa: Wanda Maximoff, a.k.a. la Bruja Escarlata, hija de Magneto, hermana de Quicksilver y durante un tiempo esposa del robot Vision (neto), utilizando sus aparentemente ilimitados poderes altera la realidad para que el mundo esté dominado por los mutantes.

Qué más ocurre o cómo regresan las cosas a la “normalidad”, no tengo ni puta idea. Pero en gran medida Wanda se vuelve loca y altera la realidad, por lo que ocurrió con sus “hijos”.

Y eso sí lo sé, porque fue de lo que publicó Novedades en “El Hombre-Araña Presenta”. Va un resumen rapidito, porque esto se suponía iba a ser de tres líneas y ya se me extendió demasiado: Wanda se casó con un robot, Vision, porque el robot tenía la personalidad del güey que era Wonder Man. Creo; no recuerdo bien, pero el punto es que el robot era humano desde un punto de vista intelectual, se enamoró de Wanda y ella de él y se casaron.

El Vaticano no estuvo disponible para comentarios entre la primera boda entre una mujer y un tostador ligeramente más avanzado.

Después Wanda tuvo dos “hijos” con su esposo robot, se suponía usando sus poderes de alterar la realidad. Pero después resultó que eran dos pedazos del alma de Mefisto (o algo así), y se los quitaron. Eso destrozó a Wanda.

Después Vision fue capturado (me parece) y desarmado, y aunque los Vengadores pudieron rearmarlo, se perdió su humanidad, y entonces Wanda perdió en muy poco tiempo a todos sus seres queridos y, consecuentemente, se le botó la canica.

Eso no fue lo que causó House of M; House of M fue otra ocasión en que se le botó la canica, pero parece que todavía relacionada con la pérdida de sus hijos ficticios y su esposo Osterizer.

Como sea, leyendo Newsarama (excelente lugar para oír lo último que pasa en comics), leí la opinión de un comentarista acerca de un TPB que Marvel sacará pronto donde se relata la primera ocasión en que Wanda se le botó la canica:


Avengers West Coast: Darker Than Scarlet trade paperback

Kevin: Collecting Avengers West Coast #51-57 and #60-62, this trade paperback chronicles one of the Scarlet Witch’s infamous breaks with reality. Marvel should lose the pretense and just release Still Crazy: The Worst of Wanda Maximoff, with some of these issues, The Avengers #187, the “Avengers Dissassembled” storyline, and maybe House of M.

“Still Crazy: The Worst of Wanda Maximoff”… ¡fabuloso!

(Para ver una historia “similar” en el Universo DC, léanse la biografía de Jean Loring en la Wikipedia).

Aire

Hoy por fin salí a que me diera el aire.

Aunque en general exagero cómo fue mi claustro por la tesis (de hecho yo exagero con todo… pero es otro tema), lo cierto es que sí fue bastante intenso. Desde fines noviembre que regresé de Guanajuato hasta hoy salí unas tres veces de mi casa. Y desde mediados de octubre hasta que acabé la tesis vi una película en el cine y leí tres novelas.

Para alguien como yo que suele leer una novela a la semana (más cuando tengo tiempo libre) y que va al cine dos o tres veces por semana, fue un comportamiento altamente inusual.

(También es cierto que todo ese tiempo no estuve 100% dedicado a la tesis, pero eso es material de otra entrada.)

Ayer cambié el tema del blog y mi galería, y además actualicé WordPress y Gallery2. También bajé actualizaciones para varias de mis máquinas Linux y vi dos películas en la tele (cagadamente, ambas muy buenas y ambas con Jack Black). Hey, así descanso yo.

Hoy, decidí entonces, era hora de salir a que me diera el aire.

Le llamé a Enrique para que me acompañara, y fuimos al centro, a mi departamento y a Ciudad Universitaria. La idea (mi idea) era comprar una tarjeta y una antena inalámbricas, preguntar por un cable que mi hermano me pidió, comprar Luces del Norte en español, conseguir una navaja de barbero, recoger las cuentas pendientes de mi depa, y revivir arce0.

Me explico. Los aditamentos inalámbricos son para un proyecto que tengo en mente que no sé si vaya a funcionar, pero que así espero. El cable era porque mi hermano descubrió en año nuevo que con uno de mis múltiples cables multimedia él puede conectar su iPod a una estéreo, y anda que hagan de cuenta que descubrió el pan Bimbo con mantequilla. La novela es para mi mamá; yo las leí en inglés y quiero que mi mamá las lea, pero en inglés está cabrón así que se las quiero conseguir en español. La navaja de barbero es porque hace como cuatro meses no me rasuro y mi barba está alcanzando proporciones (no exagero) bíblicas, y siempre he querido ver si puedo rasurarme como lo hacían los hombres de verdad. Las cuentas son porque el departamento estaba abandonado desde hacía un mes, y hay que pagar la luz o la cortan. Y arce0 tuvo a bien a morírsenos en diciembre.

En general creo que todo habría sido normal; pero en la mañana tuve que cargar una lavadora (larga historia), y tuve a bien a joderme la espalda.

Normalmente yo no tengo problemas cargando cosas pesadas, pero desde hacía cuatro meses mis actividades físicas consistían en ir de la cama a la computadora, de ahí al baño, de ahí a la computadora, de ahí a la cocina, de ahí a la computadora y de ahí a la cama de nuevo. Enjuague y repita. Durante cuatro meses.

(Exagero, por supuesto… pero no por mucho).

En otras palabras, decir que mi condición física deja qué desear se queda corto.

Como sea, no me amolé la espalda; de hecho creo que si me hubiera quedado no habría habido problema. Ni siquiera me molestaba la espalda cuando salí de mi casa; pero después de horas de caminar por el centro en el primer día realmente frío de invierno, ahora sí puedo decir sin lugar a dudas que me duele. No mucho; pero sí es molesto.

Como sea; como a las doce salimos Enrique y yo y fuimos al centro, donde compramos mis aditamentos electrónicos (y él unos que necesitaba para arce0) sin problemas, y después caminamos a la Gandhi de Bellas Artes. En ninguno de los puestos de libros que hay sobre el Eje Central pude encontrar Luces del Norte, y hasta la Gandhi tuvimos que ir para comprarla. Y en pasta dura; las ediciones en pasta blanda se habían agotado: al parecer ha sido un exitazo la novela ahora que salió la película, lo cual me da mucho gusto. Pero escribiré de eso después.

Después fuimos a comer al Salón Corona (tacos de pastor, caldo de camarón), y después fuimos a echar un ojo a la pista de hielo del Zócalo. Me hubiera gustado mucho ir a patinar ahí (no sé por qué patinar en hielo me divierte mucho), pero por lo que he oído las colas son imposibles, y ahora que fuimos Enrique y yo ni siquiera había nadie patinando.

Despujés comenzamos a preguntar por mi navaja de barbero; en inglés se les dice straight razor, y me apena la verdad no tener idea de si en español hay mejor nombre que “navaja de barbero”. Total que estuvimos dando vueltas hasta que por fin la encontramos; y sorprendentemente barata además. Yo esperaba que saliera más cara la navaja que la tira de cuero para afilarla; y salió cinco veces más cara la segunda que la primera.

(Y también debería cuestionar la inteligencia de que alguien como yo se ponga tan cerca de la yugular un arma potencialmente mortal; jugué con ella como cinco minutos al llegar a casa y ya me las ingenié para cortarme.)

Después caminamos a Pino Suárez y ahí pregunté por el cable de mi hermano, sin mucho éxito. Recogimos el carro que habíamos dejado en Chabacano y fuimos al departamento donde recogimos las notas que inevitablemente nos esperaban.

Por último (ya eran cerca de las seis de la tarde) fuimos a la Facultad de Ciencias a tratar de revivir a arce0. Ahí descubrimos que, aparentemente, el problema con la máquina consistió en que dos de sus ventiladorcitos dejaron de girar. El polvo suele hacer eso, y se puede evitar soplándoles aire de vez en cuando, o reparar con aceite o WD-40 para casos más descuidados. Los ventiladorcitos de arce0 se habían casi petrificado de la cantidad de polvo que tenían; era casi imposible hacer que giraran con las manos, así que sin duda estaban más allá del bien y del mal.

Decidimos posponer la reparación para mañana, porque no llevábamos ventiladorcitos de repuesto.

Fui a dejar a Enrique con su hermano a Rectoría, y regresé a mi casa a reposar. Ya me molesta mucho menos la espalda que cuando llegué, así que espero estar bien para mañana, porque espero que me de el aire de nuevo.

i3Theme

Los que leen mi blog utilizando un navegador ya se habrán dado cuenta, pero a los demás les comento que perdí alegremente gran parte del día de hoy cambiándole el tema a mi blog. Entre otras cosas decidí hacerlo porque tenía terriblemente abandonado al blog, pero también porque llevaba con Fluid más de un año.

El nuevo tema a su vez está basado en iTheme; básicamente sólo lo modifica para que soporte 3 columnas.

i3Theme me gusta porque es un poco más brillante que mis temas anteriores; estaba abusando de colores apagados. También tiene monerías como las hojitas de calendario para las fechas o los iconitos en varias cosas. Además abusa un montón de JavaScript (las “ventanas” se pueden arrastrar y colapsar, por ejemplo), y sin embargo en general me parece rápido.

Como sea; nuevo año, nuevo tema. Todavía debe haber cosas que no estén completamente como a mí me gustaría (como algunas cadenas sin traducir al español), así que como siempre si detectan algún error o algo que no funcione por favor díganme. Según yo todos los plugins de WordPress (que aprovechando actualicé) ya funcionan, pero siempre es posible que se me vaya algo.

Ahora tengo que ver cómo le hago para que mi Galería (que tengo todavía más abandonada) se vea parecida.