Hoy fui a la Plaza de la Computación a comprarle un MemoryStick a mi mamá. Yo esperaba comprarle uno de 1GB por unos 800 pesos; cuando llegué a la Plaza vi que estaban en 550… los de cuatro gigas.
Evidentemente me compré uno también. La verdad estaba anonadado; no creí que los precios se hubieran desplomado tan rápido.
Después le dediqué unas cuantas horas a mi proyecto que había tenido abandonado, y por último fui al cine con mi jefa a ver La Zona de nuevo, porque quería que ella la viera.
Mañana espero estrenar mi súper MemoryStick. Le caben más de 1,200 fotos en la resolución máxima de 7.2 megapixeles.
