La mudanza

Hoy a las 13:30 moví el blog de abulafia a mi nuevo y brillante hosting en www.canekpelaez.com ^[1]… les advierto que en esa liga no hay nada interesante.

En https://aztlan.fciencias.unam.mx/~canek/pensadero/ ^[2] está el blog tal y cual estaba en abulafia, y en https://aztlan.fciencias.unam.mx/galeria/ ^[3] están mis fotos… también tal y cual estaban en abulafia.

Según yo todo funciona exactamente igual (sans el cambio de dominio) y están todas las ligas y comentarios y fotos e imágenes y etc. Si detectan algún error u omisión por favor háganmelo saber a mi dirección de siempre, que sigue hasta abajo en el blog.

Desde el primer día que puse mi blog lo hice sabiendo que era temporal el estar en abulafia (la máquina no es mía al fin y al cabo), y planeé por adelantado cómo sería el migrar todo a una nueva máquina. Los planes funcionaron: fue ridículamente sencillo el cambio (me tomó menos de 24 horas).

No hay ninguna razón concreta para el cambio, excepto que yo creí que era ya necesario. En particular, Elisa nunca me dijo que tenía que mover mi blog ni nada por el estilo, y yo le estoy infinitamente agradecido por haberme dejado usar su máquina durante casi dos años para poder expresar todo lo que cruzaba por mi cabeza. En particular, en abulafia siguen dos scripts que redireccionan automáticamente al nuevo dominio por si alguien quiere entrar a las viejas direcciones del blog y de mis fotos. Esos scripts seguirán ahí hasta que yo vea que pasa más de un mes sin que nadie llegue redirigido de abulafia.

Además yo sigo a cargo del mantenimiento de abulafia, y seguiré utilizando el espacio que tengo ahí para cosas directamente relacionadas con la Facultad y la UNAM. Pero mi blog (que es enteramente personal) está en mi espacio.

Que por cierto, el hosting está poca madre. Es un servidor virtual con Linux, y tengo cuenta de root y acceso por SSH. En otras palabras, puedo hacer lo que se me pegue la gana; poner cuantos dominios quiera, cuantos servidores quiera de lo que yo quiera (siempre que no sea algo ilegal), y muchísimas otras ventajas.

Así que aprovechando que ya no tengo el ligero sentido del decoro que tenía por estar en una máquina que era de Elisa, me explayaré sin ningún tipo de miramiento con la siguiente expresión:

Pito.